Ave generosa

Nuestra Señora con Jesús niño. Obra de Margaret Tarrant ().

AVE GENEROSA

por Santa Hildegarda de Bingen (1098-1179)

Te veo,

mujer noble, gloriosa y completa,

la pupila de la pureza.

Eres la matriz sagrada

en la que Dios se complace.

Las esencias del cielo te inundaron,

y la Gran Palabra de Dios se vistió de carne.

Apareciste como un brillante lirio blanco,

mientras Dios te miraba antes de toda la Creación.

Oh hermosa y tierna,

cuánto se ha deleitado Dios en ti.

Porque ha puesto su apasionado abrazo dentro de ti,

para que su Hijo pueda amamantar tu pecho.

Tu vientre contenía alegría,

con toda la sinfonía celestial sonando a través de ti,

Virgen, que dio a luz al Hijo de Dios,

cuando tu pureza se hizo luminosa en Dios.

Tu carne contenía alegría,

como la hierba sobre la que cae el rocío,

vertiendo su vida verde sobre ella,

y así también es verdad en ti,

oh Madre de todo deleite.

Ahora deje que toda Ecclesia brille de alegría

y suene en sinfonía

alabando a la mujer más tierna,

María, la legadora / fuente de semillas de Dios.

Amén.